Gente. Gente a la que echas de menos, gente a la que sabes que jamás tendrás entre tus pequeños brazos, gente que en el fondo te quiere. Gente, simplemente gente.
Muchas veces me pongo a pensar en lo mucho que echas de menos a cierta gente. Pero, ¿tu quieres cortar por lo sano? Pues vale. Adiós. Nada más que hablar. Se acabó. ¿Que quieres que todo se borre? Vale. ¿Que no te importa separarte de mi? Ok. ¿Que no quieres ni verme más ni hablarme más? Pues lo que tú digas. No pienso amargarme pensando que jamás te tendré. Que adiós; estas tardando en salir de mi corazón, amor. ¿Te acuerdas de cuando me solías llamar amor? Sí, ¿verdad? Bueno, pues este es mi último intento... ¿Te acuerdas de todas aquellas cosas bonitas que me decías? También. Quiero que ahora recuerdes todo lo que vivimos. Las miradas, las sonrisas, simplemente, todas aquellas cosas... Y quiero que recuerdes lo que yo más añoro; la felicidad al lado de esa persona, esa persona a la que tanto quieres, la persona la qué tú más quieres. ¿Sabes quien es, para mi, esa persona? Tú. Eres tú. ¿Pero sabes que te digo? adiós. Adiós por las veces en las que te hecho sufrir, y por las que tu a mi también. Adiós por no haber motivo. Adiós, solo digo eso; ADIOS. Antes de olvidarte de una vez, mi última pregunta: ¿De verdad quieres que te diga adiós?
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